TRANCE DEL ERMITAÑO MILLONARIO

 

🔥 Trance del Ermitaño Millonario

“La llama que me compré con amor”

Ayer por la tarde me visitó una tristeza fina. No de las que duelen fuerte, sino de esas que se cuelan suaves, cuando abrís la billetera y se siente hueca, cuando el cuerpo se pregunta si alcanza, cuando el alma—libre como es—pide que el mundo también afloje.

Soñé con ser millonario. Con no pensar más en precios, ni en restas, ni en si llego. No por avaricia, sino por respiro.

Pero al caer la noche, me senté en la casa de mi hermana Ely. Y allí, entre palabras y afecto, pedí un objeto precioso: un Zippo negro mate grabado con la palabra “Ves”. Ella me lo vendió por $20.000, cuando ese mismo mañana, uno casi idéntico costaba $79.000 en la Tabaquería Petroff. Y el suyo venía completo: con bencina y piedritas originales. Yo, con el alma llena de gratitud, le ofrecí subirlo a $25.000. Ella, con el gesto más fraterno, me dijo que se lo pague en dos cuotas. Julio y agosto a $12.500 por mes.

Y entonces entendí.

No tengo efectivo. Pero tengo oro invisible.

Porque aunque mi puño de afectos parezca chico, es un puño que calienta, que enciende fuego, que me ofrece objetos mágicos grabados con verbos.

Mi Comunidad Afectiva Alippi García es mi patrimonio incalculable. Mi familia. Mi fraternidad. Mi clan elegido. Mi Orden Mercedaria. Mi Comunidad del alma.

Y yo soy ese ermitaño millonario, que prende su fuego con un encendedor que dice “Ves” y efectivamente -sí, veo-.